Esta tarde, el candidato a vicepresidente de Juntos por el Cambio, Miguel Angel Pichetto, fue recibido por el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, con quien comparte (sin llegar a sus extremos, por suerte) algunas ideas políticas.
Al finalizar el encuentro con el mandatario en el Palacio del Planalto, en Brasilia, Pichetto brindó una conferencia de prensa, en la que reconoció en Bolsonaro un líder importante para América Laina, fundamental para el Mercosur y en la integración del bloque con la Unión Europea. Contó que conversaron sobre temas estratégicos y, además del acuerdo con la UE, analizaron la situación política de Venezuela, respecto a la cual comparten una visión similar, considerando al régimen de Nicolás Maduro como una dictadura y un riesgo para América del Sur.
En esa línea, el candidato que acompaña a Macri en la fórmula presidencial señaló las similitudes chavistas con el kirchnerismo: "Hay expresiones del espacio político que conducen la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner y Alberto Fernández que son complicadas. Hoy en Buenos Aires un ex juez de la Corte Suprema, el doctor (Raúl) Zaffaroni, muy cercano a la expresidenta, ha manifestado la reforma de la Constitución como un dato imprescindible para evaluar el rol de los medios de comunicación, esto es un hecho muy grave. En realidad aspiran quizás a un modelo muy parecido a lo que fue la reforma constitucional en Venezuela con (Hugo) Chávez. Muy recientemente Cristina Fernández habló de intervención en las ganancias de las empresas, también es un dato muy complejo desde el punto de vista de una visión liberal capitalista, de integración al mundo que hay que sostener para que Argentina pueda crecer. Son datos que indudablemente preocupan y que podrían generar el aislamiento de Argentina", dijo.
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Asimismo, en la media hora que conversó con Bolsonaro, Pichetto le expresó su convicción de que revertirán el resultado de las primarias en las elecciones de octubre. "Sabemos que hay un marco de solidaridad del presidente Bolsonaro", agregó el hombre oriundo de Banfield. Y en retribución, ratificó su apoyo "a la soberanía de Brasil" por la polémica que se generó respecto a los incendios en el Amazonas: "Sabemos del esfuerzo que está haciendo el Gobierno de Brasil en la lucha contra el fuego y reivindicamos el principio de soberanía de los pueblos y de no intervención en escenarios internacionales en temas que son propios del Estado".
Sobre el acuerdo con la UE, Pichetto reconoció la presión de los sectores de producción primaria en Francia ante la firma, y dijo que esperan que pese a eso se consolide: "La integración comercial es fundamental: consideramos que el Mercosur es una herramienta central, y el Mercosur no existe sin Brasil. Argentina tiene que hacer un esfuerzo de diálogo y de fraternidad con el presidente Bolsonaro, que es el hombre que ha sido elegido por la voluntad de los brasileños".
"Cualquiera sea el Gobierno que emerja de las elecciones, esperemos que prime la racionalidad y que el Congreso argentino apoye y respalde el acuerdo. Es fundamental para los intereses de Argentina, de Brasil y del Mercosur que ese acuerdo sea convalidado por los países en los congresos respectivos. Creo que las manifestaciones en contra han sido posiciones más electorales: la expresidenta había también impulsado el acuerdo con la UE, aunque no lo había logrado concretar", opinó.
Por último, Pichetto sostuvo su confianza ante las elecciones de octubre, pese a la derrota de las primarias: "Son dos elecciones totalmente distintas, la de agosto funcionó como una gran ley de lemas para la oposición, en donde convivieron espacios políticos e ideológicos distintos, sectores de la izquierda, del peronismo, y todos coayudaron para que la fórmula Fernández-Fernández tuviera un resultado importante. El Presidente Macri obtuvo los mismos votos que en el año 2015, más un millón de votos extra. Esta elección está abierta".
"Estamos convencidos de que vamos a revertir este resultado y vamos a ir a un balotaje donde sí se van a contraponer las dos propuestas, los dos modelos. El de una economía cerrada, de intervención, o una economía más abierta, que plantee crecimiento, orden fiscal, una mirada dirigida a la integración económica, al mundo, con una visión más moderna, más inteligente, y de ninguna manera volver hacia atrás, con medidas de cepo y de intervención económica muy rígida", concluyó.
