Una jornada políticamente difícil afectó a los mercados que ya venían preocupados por los indicadores de economía que muestran un menor crecimiento global.
En su discurso ante la Asamblea de las Naciones Unidas, Donald Trump señaló los perjuicios que sufrió Estados Unidos desde la incorporación de China a la OMC porque hizo un abuso de las reglas del organismo. También defendió el uso de los aranceles para defender la producción nacional en un mensaje cuya filosofía quedó claramente expuesta en la frase “el futuro no les pertenece a los globalistas sino a los patriotas”. Los mercados, que leyeron ese discurso como la antesala de una negociación dura con los chinos, respondieron en consecuencia con bajas generalizadas.
Pero el mayor impacto político del día lo produjo el anuncio de la titular de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi de que comenzarían formalmente las investigaciones que podrían llevar a iniciarle el juicio político a Trump.
El motivo alegado es haber violado la Constitución y atentado contra la seguridad nacional al, supuestamente, pedirle al Gobierno de Ucrania que investigue al hijo del exvicepresidente Joe Biden y actual precandidato demócrata a la presidencia. Es decir que una potencia extranjera intervenga en el proceso político de Estados Unidos. Trump niega el contenido de esa conversación y autorizó a publicar su transcripción. Pero el proceso, deberá recorrer varias instancias, seguirá su marcha y estará en el centro del debate político en Estados Unidos. Habrá seis comisiones que investigarán el comportamiento del Presidente y posteriormente elevarán sus conclusiones a la de Justicia que decidirá si eleva el pedido de juicio político al plenario de la cámara. Si resulta aprobado, se inicia el juicio político ante el Senado.
Boris en problemas
Del otro lado del Atlántico, en el Reino Unido, la Suprema Corte por unanimidad declaró ilegal la suspensión del Parlamento que había impulsado Boris Johnson. Ahora, como desde hace varios meses, están todas las opciones abiertas con relación al Brexit y el final es incierto. Para algunos analistas, el escenario más probable es el de una convocatoria a elecciones generales.
La economía
Pero más allá de los factores políticos, los datos económicos también generan preocupación en los mercados.
En Alemania, se conoció el índice que elabora Ifo sobre clima de negocios que mostró una leve suba en septiembre con relación a agosto, al pasar de 94,3 puntos a 94,6. Pero si se desagrega el índice, se observa que hubo una mejora en la evaluación de la situación actual pero un deterioro en cuanto a las expectativas. Esa percepción que tienen los empresarios es coherente con la opinión de muchos analistas que pronostican que Alemania entrará en recesión.
A su vez, en Estados Unidos, el índice que elabora la entidad privada Conference Board mostró una caída en la confianza de los consumidores. En un contexto de cierta desaceleración del nivel de actividad, el índice pasó de 134,2 puntos en agosto a 125,1 en septiembre.
Durante la semana se fueron conociendo distintos indicadores sobre la actividad manufacturera en las principales economías del mundo que muestran una caída como consecuencia del conflicto comercial no resuelto entre China y Estados Unidos.
En el marco de tasas de crecimiento más bajas e inflaciones controladas, los bancos centrales siguen bajando las tasas de interés y adoptando otras medidas de estímulo monetario. Es lo que hicieron en las últimas semanas los dos grandes: la Reserva Federal y el Banco Central Europeo. Pero también fue el camino que siguió el Banco Central de Brasil y esta semana haría un nuevo recorte el de México. Pero habrá más. La Fed volvería a bajar la tasa en octubre. No obstante todos estos movimientos, los pronósticos de crecimiento global se están corrigiendo a la baja. Hace poco lo hizo la OCDE y en dos semanas será el turno del FMI cuando dé a conocer las Perspectivas Económicas Mundiales en ocasión de la Asamblea Anual que se realizará en Washington.
