El Departamento de Comercio de Estados Unidos informó que las ventas minoristas crecieron 0,7% en julio con relación al mes anterior. Se trata de la mayor suba desde marzo y es consecuencia de la fortaleza del mercado de trabajo y la expansión de los ingresos. El impacto en el nivel de actividad es relevante porque el consumo representa dos tercios del producto interno. Por otra parte, la Reserva Federal comunicó que la producción industrial se contrajo 0,4% el mes pasado con respecto a julio. Pero a pesar de otros indicadores que muestran cierta desaceleración de la economía, ayer la Reserva Federal los consumidores siguen sosteniendo el nivel de actividad.
Estos datos se conocen en un momento en el cual está en pleno debate si la economía global marcha a una desaceleración brusca o incluso a una recesión. Asociado a ese debate, se asiste a una enorme volatilidad en los mercados financieros. De todas maneras, aunque a tasas más bajas, la economía mundial sigue creciendo, y también en la zona euro, el consumo se sostiene de la mano de un mercado de una baja tasa de desempleo para lo que son los parámetros de la región.
En este contexto, los bancos centrales siguen recortando las tasas de interés, varios ya lo han hecho y los recortes seguirán. Ayer se sumó a la lista el Banco Central de México, que bajó la tasa de interés por primera vez en cinco años, llevándola del 8,25% al 8%. El mercado descuenta que en su próxima reunión, prevista para los días 17 y 18 de septiembre, la Fed decidirá una nueva baja de un cuarto de punto. El Banco Central Europeo también pondrá en marcha políticas monetarias expansivas en septiembre, más audaces, incluso, de lo que espera el mercado según anticipó ayer un director de la entidad.
Muchos analistas, de todas maneras, advierten que hay datos que reflejan las dudas sobre el nivel de actividad. Uno de ellos, es la búsqueda de activos seguros como los bonos del Tesoro de Estados Unidos ? que ofrecían el menor rendimiento desde 2016- lo cual fortalece al dólar contra el resto de las monedas. También preocupa el irresuelto conflicto comercial entre Estados Unidos y China que ayer anunció represalias que afectarían a las exportaciones estadounidenses. Esas dudas del mercado se expresan en la inversión de la curva de rendimiento de los bonos lo cual indica que se percibe un riesgo de recesión.
