Por Pablo Varela
La ciudad de Mar del Plata es la más grande del interior bonaerense. Con un padrón electoral que supera los 500.00 electores, es la cabecera del distrito de General Pueyrredón y de la quinta sección electoral, que es la tercera con mayor volumen de empadronados.
La actual gestión de Carlos Arroyo, quien accedió a la intendencia en la misma boleta que Mauricio Macri, nunca logró hacer pie y ha sufrido un vertiginoso desgaste.
Juntos por el Cambio tendrá la interna entre la UCR y el PRO, más importante de la provincia. Con un largo recorrido territorial, la candidata del radicalismo será la actual concejala Vilma Baragiola, que encabeza una lista local pura de la UCR. Con el lema “la candidata de la gente”, la dirigente radical se lanzó días atrás.
Los sondeos colocan por encima a la candidata del radicalismo que se ubica en torno al 20% en intención de votos.
Del otro lado estará, el diputado del PRO, Guillermo Montenegro, quien viene instalándose en la provincia desde hace tiempo, tiene con el respaldo de la gobernadora María Eugenia Vidal. La lista que encabeza Montenegro, conlleva un acuerdo con todos los otros espacios del oficialismo, incluyendo a la Coalición Cívica, al Partido Fe y hasta incluso el socialismo, algo similar a lo que sucedió en la ciudad de Buenos Aires.
En principio, los sondeos colocan levemente por encima a la candidata del radicalismo quien se ubica en torno al 20% de los votos, mientras que el hombre del PRO hoy ronda el 18% de intención de voto. Así lo informaron ante El Economista fuentes de Juntos por el Cambio que trabajan en el distrito.
La gobernadora Vidal, se ubica levemente por encima de la suma de los candidatos, alrededor del 41%, algo que en el oficialismo creen, podría facilitar que quien resulte ganador en la PASO, capitalice los votos del derrotado.
Al igual que en otros conglomerados urbanos, la imagen e intención de voto de presidente Mauricio Macri, se ubica por debajo de los números de la gobernadora.
No en vano, Macri cerró su gira por el interior bonaerense el viernes de la semana pasada, buscando consolidar su candidatura y la propuesta del oficialismo, en una ciudad que tanto en 2015 como en 2017 acompañó a Cambiemos.
En las últimas elecciones, Esteban Bullrich se impuso por sobre Cristina Kirchner por casi 20 puntos. El senador del oficialismo obtuvo el 49% de los votos, contra el 30% de la legisladora de Unidad Ciudadana Un dato insoslayable: el peronismo jamás logró imponerse en la ciudad balnearia.
La candidata del Frente de Todos, será la diputada kirchnerista Fernanda Raverta quien está por encima del 30% en intención de voto. En el oficialismo provincial ponderan las cualidades de la legisladora nacional como candidata, aunque su campaña “atada” a las figuras de Cristina y Axel Kicillof, podrían jugarles en contra.
Días atrás, Cristina presentó junto a Raverta y Kicillof, su libro “Sinceramente” en el Hotel Provincial.
Tanto Juntos por el Cambio, como el Frente de Todos enfrentan un mismo problema. Arroyo, quien no fue habilitado a competir en PASO jugará con boleta corta, al igual que el exintendente Gustavo Pulti, proveniente del vecinalismo, supo en el pasado competir bajo el paraguas del kirchnerismo, aunque esta vez le fue negada la boleta completa.
Según los números que circulan, Pulti podría mellar considerablemente el caudal de Raverta, ubicándose en torno al 15%, mientras que Arroyo, tiene el 5% en intención de voto.
En materia económica, Mar del Plata ha sentido fuertemente el impacto de la inflación y del aumento de tarifas, lo que ha complicado al sector comercial y de servicios con una tasa de desempleo siempre por encima de la media, producto de la estacionalidad.
