Por Luis Varela
Con dos bancos internacionales aconsejándoles a sus inversores tomar posiciones cautelosas, la segunda rueda de julio mostró ayer a los mercados con fuertes cimbronazos en algunas cotizaciones, pero los títulos argentinos lograron sobrellevar bien los aconteceres de un día complejo.
Mientras sorprendió la renuncia de Christine Lagarde al FMI, para ir a presidir el Banco Central Europeo, se mantiene la tendencia hacia un menor crecimiento de las principales economías.
Por eso, ayer, mientras las principales bolsas del mundo se movieron con pocas variaciones, el grueso de los inversores estuvo tomando posición en bonos, por lo que la tasa a 10 años de Estados Unidos se achicó hasta el 1,97% anual y, al mismo tiempo, ya son cinco los países cuyos títulos públicos tienen tasas largas negativas, por inversores que siguen comprando bonos, a pesar de tener cotizaciones por encima de la par: Francia, Holanda, Japón, Alemania y Suiza.
Detrás de este movimiento, con rumores de que Estados Unidos recibió con desagrado el acuerdo planteado entre la Unión Europa y el Mercosur, ayer rodó en el mercado la virtual amenaza de que Washington les aplicaría a los europeos aranceles mayores, para compensar ese movimiento.
El resultado de esa movida fue un gran crecimiento de la desconfianza, por lo que en muy pocas horas el precio del oro tuvo un salto considerable. Por el acercamiento entre Trump y Xi el metal amarillo había bajado de US$ 1.431 a US$ 1.385, pero ayer volvió a elevarse rápidamente, hasta US$ 1.426 por onza, acercándose otra vez al precio tope de los últimos seis años.
Mientras tanto, otro indicador clave de las decisiones económicas también ajustó las clavijas. Siguen apareciendo reportes que pronostican bajos niveles de actividad, por lo que pese a movimientos de la OPEP el valor del crudo volvió a desinflarse ayer de manera importante. Entre el 10 de junio y cerca del cierre del mes pasado el petróleo había subido desde US$ 52 a casi US$ 60, pero ayer la cotización achicó 4,5% hasta US$ 56, con muchos analistas ciertamente sorprendidos.
Estas variaciones no llegaron a afectar a las Bolsas. Hubo subas del 0,2% al 0,3% para los índices de la Bolsa de Nueva York, pero la Bolsa de San Pablo cedió 0,7% y la de México terminó sin cambios. Donde sí hubo algún impacto fue en las monedas: en el exterior el dólar subió 0,4% contra la libra y 0,1% contra el real, pero bajó 0,3% contra el mexicano y 0,5% contra el yen. Al tiempo que en Buenos Aires, a 39 días de las PASO, la baja del dólar se amortiguó: el oficial cedió 3 centavos hasta $ 43,45 pero el blue subió 5 centavos hasta $ 43,50, con el dólar mayorista perdiendo 17 centavos, hasta 42,20 pesos. Y con el BCRA perdiendo US$ 30 millones de las reservas por lo que quedan US$ 64.118 millones.
Mientras que en la relación del peso argentino, el real bajó 7 centavos hasta $ 10,96, el euro cedió 22 centavos hasta $ 47,59 y la libra cayó 46 centavos hasta $ 53,09.
Esto se dio con mayor descompresión en la tasa de las Leliq, pero con las tasas de los plazos fijos sostenidas. El BCRA pagó por las Leliq tasas del 61,18% anual promedio, con un máximo del 61,38%. Mientras que en plazos fijos los bancos pagaron 46% por plata chica y 50% anual por plata grandes.
En la negociación con bonos, hubo un paso atrás para los bonos de Brasil (en línea con la baja de las acciones de San Pablo) y se observó una fuerte suba para los de Italia y Grecia. En el caso de los bonos argentinos, con menos ne
gocios, se acentuó la suba y los títulos públicos nacionales volvieron a precios que tuvieron en febrero de este año, por lo que el riesgo país achicó hasta 806 puntos, por lo que descendió 20% en los últimos treinta días.
La demanda de bonos está más distribuida. El 80% de lo operado en bonos se transó en siete papeles: AY24 36%, AO20 15%, TC20X 9%, AC17 6%, TC21 6%, TC20 5% y DICA 3%. Y en los extremos se vio un salto del 14% para el bono TVPYD y alzas del 2% al 4,4% para los bonos DICYC, TVPP, DICPC, PARP, PAY0D, CUAP y A2E7D. Y caídas del 1% al 7% para los bonos TC21C, PMJ21, TVPA, AE48 y PB21D.
Mientras las bolsas del exterior tuvieron un día mediocre, para la Bolsa porteña fue positivo. Con menos negocios ($ 911 millones), el índice Merval recuperó 0,7%, con el 80% de lo operado concentrado en diez papeles: el Grupo Galicia se llevó el 22% de los negocios, Supervielle el 14% y Petrobras Brasil el 8%.
En los extremos se vieron subas del 2% al 5% para Longvie, Boldt, Supervielle, Capex, Rosenbusch, Galicia, Macro, Francés, Richmond, Hipotecario, Valores y Morixe. Con desplome del 10% para Domec, y bajas del 2% al 5,5% para Agrometal, Semino, Grimoldi, YPF, Juramento, Dycasa, Tenaris, Carboclor y Petrobras Brasil.
Mientras que los ADR argentinos que cotizan en Nueva York mostraron alzas del 1% al 3,5% para Galicia, Macro e Irsa P; y bajas del 1% al 2,2% para YPF, Irsa I, Tenaris y Cresud.
Finalmente, como dijimos, en commodities hubo grandes movimientos. Se registró un desplome mientras que los metales preciosos estuvieron muy firmes: avance del 2,5% para el oro y mejora del 1,2% para la onza de plata. Los metales básicos actuaron débiles: merma del 0,7% para el aluminio, baja del 0,8% para el cobre y descenso del 1,7% para el níquel. En Chicago hubo una suba del 0,5% para el maíz, baja del 0,9% para la soja y descenso del 1,7% para el trigo. En Rosario se vio una suba del 1,9% para la soja, baja del 1,1% para el trigo y caída del 6,3% para el sorgo. Y hubo un repunte del 3% para el Bitcoin, con el resto de las criptomonedas también muy inestables.
