Por Daniel Rosato Presidente de Industriales Pymes Argentinos (IPA)
Las pymes industriales se encuentran ante un escenario con variables que conforman un presente lleno de dificultades. Lo importante de consignar las razones, aun ante la posibilidad de ser repetitivos, se convierte en fundamental en momentos en los que se define el futuro institucional del país. Entendemos desde Industriales Pymes Argentinos (IPA) que es central una planificación que tenga a los pequeños y medianos fabricantes como motor de la recuperación y del desarrollo económico del país.
La decadencia del mercado interno a partir de la caída del consumo y la pérdida de puestos de trabajo generó una inevitable depresión en la producción nacional, que ya había sido golpeada por una política de comercio exterior que permitió el ingreso indiscriminado de las importaciones.
Es fundamental plasmar un acuerdo nacional con todos los sectores para recomponer el tejido social.
El ajuste de las tarifas energéticas se convirtió en un costo insoportable para las pymes industriales, tanto para las gas y electrointensivas como para las que la necesitan de manera ordinaria. A todas las fábricas les significó un cambio en la matriz del negocio, al punto de que miles debieron cerrar por falta de competitividad.
El inviable nivel de tasa de interés para desarrollar la actividad industrial, el aumento de la presión impositiva que entró en contradicción con la sancionada reforma tributaria, la pérdida de competitividad para exportar a partir de la reinstalación de retenciones y de la quita de reintegros, y la continua caída de consumo masivo llevó a que los desafíos que enfrentaban las pymes para entrar a un modelo nuevo se transformaran en insoportables anclas para el desarrollo.
Desde IPA hemos realizado análisis, pusimos en carpetas propuestas concretas y acudimos a cuanta mesa de diálogo se nos propuso para poder corregir situaciones que preveían males evitables. Lejos de pensar en negativo, mantenemos nuestra postura de hacer un aporte para el bien de las pymes industriales, que en definitiva lo será para el país.
Medidas urgentes
Con el antecedente del trabajo serio y franco, creemos que la producción argentina necesita tres medidas urgentes para frenar el ocaso de las pymes: congelamiento de los costos energéticos, freno de los embargos de la AFIP y los organismos de recaudación provinciales, y financiación subsidiada para bienes de capital de las fábricas, todo por el término de seis meses. Es urgente poner en práctica un shock de medidas que reavive las expectativas de negocios en el país. Nada bueno viene con antecedente de pesimismo y desconfianza. Si durante un semestre existe previsibilidad de costos en el origen de la producción, entonces se podrá confiar en una desinflación posible. Las pymes necesitan sus propios Precios Cuidados.
Acuerdo nacional
A mediano plazo, mientras se aplica esa batería de medidas, es fundamental plasmar un acuerdo nacional con todos los sectores para recomponer el tejido social, y la única forma es a partir de las pymes, sector que genera el 70% del empleo y que tiene capacidad de reducir la pobreza. Ese plan debe contener para el 2020 una reforma tributaria que reduzca la presión impositiva -que incentive la generación de puestos de trabajo- y una ley de fomento a la producción a través de los elementos centrales: la creación de un banco de desarrollo, que sea motor financiero exclusivamente para la industria, el comercio y la construcción nacionales; la sanción de una ley que mejore las relaciones laborales, sin perjudicar los derechos de los trabajadores pero sumando beneficios a la productividad; y un programa exportador quinquenal que beneficie a la inversión.
Si somos capaces de avanzar en esta senda, el largo plazo tendrá múltiples respuestas a las necesidades de hacer grande a Argentina. Desde IPA estamos convencidos de que las pymes son la solución de los problemas de hoy, y serán las herramientas del desarrollo del mañana.
