En medio de la contracción de la economía y la fuerte devaluación que empezó hace un año, una de las actividades más afectadas es la inmobiliaria. Según el último reporte del Colegio de Escribanos de la Ciudad de Buenos Aires, durante el mes pasado se registró un total de 2.774 operaciones de compraventa de inmuebles en la ciudad, que implica una caída de 53,9% respecto al volumen de escrituras de abril del año pasado, aunque representa a la vez un leve alza de 1,3% en relación a marzo.
Según el presidente del Colegio Profesional Inmobiliario, Armando Pepe, el fuerte descenso se debe a que la comparación se hace frente a un mes del año pasado en que todavía estaban funcionando muy bien los créditos UVA, que se frenaron a partir del mes siguiente, con el inicio de la escalada del dólar. “Hoy el único comprador es el consumidor final. Es decir, el que tiene todo el dinero junto, ya sea porque vendió otra propiedad más grande o más chica”, afirmó Armando Pepe a El Economista. “El inversor está sentado sobre los dólares o poniendo el dinero en plazos fijos”, añadió el especialista.
“Estamos en una incertidumbre política, económica, financiera, etcétera. Hay que saber primero quien va a ser el Presidente y qué política económica va a tomar”, apuntó Pepe en justificación a la incidencia del año electoral sobre el poder de decisión de los potenciales compradores, por lo cual estima que en el corto plazo el mercado se mantendrá sin cambios. Para el especialista, el alza de abril frente a marzo es “insignificante”, y asegura que en lo que va de mayo el mercado se mantiene igual, “muy tranquilo”.
Además de la incertidumbre política, Pepe señala entre las principales incidencias a la inflación, el dólar y el atraso de las paritarias. Por su parte, Silvio Guaita, economista especializado en el sector inmobiliario, consultado por este diario consideró que los próximos meses serán mejores que los primeros del año, que por una cuestión estacional siempre son bajos y que este año se potenciaron por la coyuntura económica, aunque en la comparación interanual los resultados seguirán siendo negativos.
De acuerdo con los datos del Colegio de Escribanos, entre las 2.774 operaciones realizadas durante el mes pasado, sólo 198 fueron por medio de crédito hipotecario, que representan apenas 7% del total y a la vez indican una baja de 91% comparado con un año atrás. Respecto a los montos, el registro indica que el valor promedio de las transacciones fue de casi $5 millones, que representa una suba de 66,8% anual, mientras que medido en dólares el promedio fue de US$ 112.221, que significó 22,8% menos que un año atrás.
