Los diez puntos que el Gobierno propone para acordar algunos lineamientos políticos con la oposición siguen por ahora en la indefinición, tras las múltiples cartas que envió el presidente Mauricio Macri la semana pasada. La escenificación de un pacto es todavía una imagen lejana y, por ahora, el Gobierno logra avances más modestos con opositores que se mostraron cooperativos en distintas oportunidades. En ese tren, ayer el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, se reunió con el senador peronista Miguel Angel Pichetto, para reafirmar el apoyo al acuerdo del jefe del bloque del PJ en la Cámara Alta y apostar por la “previsibilidad”.
Según pudo saber El Economista de una fuente cercana a Frigerio, en el encuentro, que se desarrolló en el despacho de Pichetto, el senador reiteró su apoyo a los diez puntos del Gobierno, mientras que el ministro planteó pasos a seguir y aprovechó la reunión para repasar la agenda legislativa.
En un comunicado de prensa el bloque del PJ en el Senado, se consignó que Frigerio y Pichetto conversaron “sobre la necesidad de dar previsibilidad a Argentina, para lo cual es importante dialogar sobre políticas para el país que se mantengan en el tiempo” y plantearon que “la línea divisoria en nuestro país es la que se tiene que dar entre los partidos que defienden la democracia y los intereses nacionales, y los que tienen una visión autoritaria”.
Pichetto fue de los primeros en aceptar el acuerdo propuesto por el Gobierno, fue uno de los interlocutores de Alternativa Federal con los que Frigerio avanzó en la gestación de los diez puntos.
Sin embargo, más allá de algunos apoyos iniciales, sobre todo de gobernadores dialoguistas, el acuerdo propuesto por Macri parece lejos de derivar en una foto de un gran pacto con todos los sectores incluidos.
Por ahora, el Gobierno consiguió apoyo de algunos gobernadores, que incluso se reunieron y se fotografiaron con Frigerio. Son Omar Gutiérrez (Neuquén), Alberto Weretilneck (Río Negro), Juan Manuel Urtubey (Salta), Domingo Peppo (Chaco) y Gustavo Bordet (Entre Ríos). También dio respaldo Daniel Scioli.
La apuesta mayor del Presidente fue incluir a Cristina Kirchner en la convocatoria. Por ahora, no respondió. A través de emisarios, como Daniel Filmus, dejó trascender que contestará con críticas.
El PJ bonaerense rechazó el acuerdo, al igual que lo hizo a título personal Felipe Solá, entre otros referentes justicialistas.
Sergio Massa respondió por carta, pidió una agenda de reuniones, y dijo que el Gobierno “planteó un decálogo de buenas intenciones, pero no un compromiso serio por Argentina”. Roberto Lavagna opinó que debería darse un diálogo “despojado de la cuestión electoral”. Ninguno de estos dos precandidatos se prestó, por el momento, a ninguna foto con el Gobierno.
El respaldo al acuerdo llegó desde las cámaras empresariales, la Conferencia Episcopal Argentina y las iglesias evangélicas nucleadas en la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina (Aciera), entre otros sectores.
