Parece que no hay dudas, ni vuelta atrás. En el entorno de la senadora nacional Cristina Kirchner ya dan por hecho que será candidata a presidente de la Nación, por más que la confirmación llegue sobre el cierre de listas. El lanzamiento de “Sinceramente” y su presentación en la Feria del Libro fueron indicadores de esa decisión, no oficializada. Que en las últimas horas convive con declaraciones en consonancia.
“En la sociedad hay un interés bastante grande para que Cristina sea candidata”, sostuvo ayer en una entrevista en Radio con Vos el diputado nacional Axel Kicillof. El economista hace tiempo que recorre la provincia de Buenos Aires en su nombre, con la posibilidad de ser candidato. Pero también tiene a su cargo reuniones con empresarios y con gobiernos potencialmente aliados o con los que una eventual gestión de Cristina tendrá que negociar. La semana pasada estuvo en México, con funcionarios de Andrés Manuel López Obrador y con referentes del mundo financiero de Estados Unidos. “Los inversores quieren saber qué hará la oposición si gana. Pero la gran pregunta es qué va a hacer este Gobierno en los próximos siete meses para no agravar la situación”, sostuvo ayer el exministro.
El principal vocero y potencial jefe de campaña de la senadora, Alberto Fernández, también habló de esa posibilidad. Con cautela, pero avanzando en esa posibilidad. “Todos esperamos saber si ella será o no candidata. Porque crece una suerte de reclamo social de que aparezca una oposición que reemplace a Macri y ella representa la oposición más firme al actual Gobierno”, sostuvo en una entrevista con Página 12. Y añadió: “Cristina debería ser candidata porque no hay nadie que se acerque a las condiciones que ella tiene. Ella tiene alrededor de 36 puntos y el opositor más cercano concentra la sexta parte de esos votos. Entonces me parece que no hay mucho para dudar”. Fernández está encargado, entre otras tareas, de reconstruir el entramado de contactos con sectores peronistas y progresistas que se habían malquistado con la expresidenta.
Otro dirigente cercano a la senadora que dejó su presunción fue Oscar Parrilli, a cargo del Instituto Patria. “Cristina se plantea la posibilidad de ser candidata. Ella no escapa a lo que le pide la gente”, dijo hace unos días en el programa Crónica Anunciada. Algo parecido a lo que expresó el sindicalista Hugo Moyano: “La gente la ve a Cristina como la persona que puede sacar el país. Va a ser difícil que pueda eludir la responsabilidad de ser candidata”, sostuvo el camionero, otro de los dirigentes que hicieron las paces con la senadora en el último año.
De esa especie de “operativo clamor” también participó, de alguna manera, Felipe Solá. El exgobernador de la provincia de Buenos Aires es precandidato a presidente y se propuso varias veces como prenda de unidad si la senadora decidía no presentarse. “Si Cristina es candidata, decidiremos democráticamente si vamos a unas PASO”, sostuvo ayer reconociendo la dificultad de enfrentarla competitivamente en una interna.
