La foto de Cristina Kirchner sentada en el banquillo de los acusados se producirá hoy si, como se prevé, concurre al mediodía a los tribunales federales de Comodoro Py para estar presente en la primera audiencia del juicio oral y público por el caso Vialidad. El inicio del proceso se produce envuelto en renovadas polémicas que se sumaron a la de la Corte Suprema de la semana pasada. Alberto Fernández dijo que, si llegan al poder nuevamente, deberán revisar sentencias judiciales dictadas en los últimos años y provocó la reacción del Gobierno.
“Me parece que vamos a tener que revisar muchas sentencias que se han dictado en los últimos años, que carecen de todo sustento jurídico y de toda racionalidad jurídica”, dijo Fernández antenoche, en declaraciones al programa El Destape. Apuntó contra los jueces Claudio Bonadio (a cargo de la causa de los cuadernos, entre otras que involucran a Cristina) y Julián Ercolini (quien fue el juez que investigó y elevó a juicio oral el caso Vialidad contra la exmandataria): “Eso se ve claramente en materia penal. Por ejemplo, las cosas que han dicho en los juicios contra Cristina, Bonadio o Ercolini, son dantescas”.
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En la mira de Fernández también estuvieron los camaristas de casación que rechazaron recursos de la defensa de Cristina en la causa Vialidad. “Ha habido un mecanismo cuidado, por el cual ciertos jueces federales encontraron el apoyo en la Cámara Federal de la teoría (sobre prisión preventiva del camarista Martín) Irurzun y también por la Cámara de Casación, con los fallos de (Juan Carlos) Gemignani, (Gustavo) Hornos y (Mariano) Borinsky, que han operado casi como un sistema de mayoría automática que avalaban casi todas las decisiones que venían de la Justicia Federal”. Y remató: “Con la imposición de detenciones anticipadas y arbitrarias se han dicho cosas dantescas empezando por la teoría Irurzun”.
Los dichos de Fernández generaron la respuesta del Gobierno. Tras la reunión de Gabinete de ayer, el encargado de responder fue el ministro de Educación, Alejandro Finocchiaro. “Un presidente no puede revisar sentencias del Poder Judicial, porque se supone que en Argentina tenemos división de poderes establecida por la Constitución Nacional, que nosotros hemos respetado a rajatabla”, sostuvo Finocchiaro. “Entonces, si un candidato presidencial dice que va a revisar las sentencias del Poder Judicial, me suena horrible”, resaltó.
“Si un candidato presidencial dice que revisará sentencias del Poder Judicial, me suena horrible”, dijo Finocchiaro.
Al referirse a las declaraciones de Fernández, quien días atrás había señalado que muchos jueces emitieron fallos que son “barrabasadas”, Finocchiaro propuso hacerle al candidato una serie de preguntas. “Primero, si va a renunciar al día siguiente de haber asumido; segundo, si va a modificar la Constitución Nacional, como ya tenían pensado Diana Conti y otros kirchneristas; si va a reponer al frente del Ejército a Milani; ¿Qué va a hacer con la Corte Suprema de Justicia?; si va a garantizar la impunidad, y si va a expropiar los medios de comunicación”. El ministro agregó que “esas son cosas que seguramente les han quedado en el tintero”.
Con ese ruido de fondo se dará el arranque del primer juicio oral y público por corrupción contra Cristina, en el que Alberto Fernández es uno de los 160 testigos convocados a declarar, como los restantes jefes de Gabinete del kirchnerismo.
