El Economista - 70 años
Versión digital

mar 16 Abr

BUE 16°C

Un solo objetivo (y la única apuesta posible): desacelerar la inflación

17 abril de 2019

Todas las medidas anunciadas hoy por el Gobierno van en la misma dirección: desacelerar la tasa de inflación que se vino acelerando en los últimos meses. En marzo fue de nada menos que 4,7% y abril parece tener un piso de 3,5%.

El Gobierno probó varios enfoques y ninguno funcionó, y debió recaer, a regañadientes y con resistencias internas, en herramientas criticadas por ellos. A esa lista se puede sumar el virtual congelamiento del dólar, anunciado ayer. La coherencia intertemporal es importante, pero el pragmatismo y mantener el poder más todavía. Gobernar es emparchar, y ni hablar en Argentina.

Faltan menos de cuatro meses para las primarias, las encuestas muestran a Cambiemos segundo y no hay tiempo para pensar en una reactivación económica que la sociedad perciba y mucho menos para que se genere empleo.

La única apuesta posible es mostrar que la inflación empezó a bajar. Es el tema que más preocupa a los argentinos (no es para menos: en 2018, los salarios cayeron más de 10 puntos) y el Gobierno no puede enfrentar una elección sin mostrar, cuanto menos, iniciativas para resolverlo.

“Seguimos convencidos de que para bajar la inflación en el largo plazo ?y terminar con este problema que tenemos desde hace 75 años?, son indispensables los cambios profundos y estructurales que venimos implementando en estos años. En el corto plazo, sin embargo, tomamos medidas que protegen a los argentinos en esta etapa de transición, para que juntos podamos ganarle a la inflación”, dice el comunicado oficial.

La apuesta es a que una desaceleración de la suba de precios, combinada con aumentos salariales que surgirán de las paritarias que se están negociando, mejore los ingresos reales e impulsen el consumo.

En esta nota

Seguí leyendo

Enterate primero

Economía + las noticias de Argentina y del mundo en tu correo

Indica tus temas de interés