Por Luis Varela
En una rueda frenética, y con precios ciertos (porque se operaron los montos negociados más altos de las últimas nueve semanas), el mercado argentino sufrió un gran ida y vuelta de cotizaciones, que generó enormes temores y precios durísimos a media rueda y posteriores compras de oportunidad, con muchos analistas intentando averiguar quiénes eran los que salían en la apertura y quienes los que entraban en el cierre.
Por su importancia en la repercusión sobre los pequeños inversores, el foco de todas las conversaciones estuvo, por supuesto, en torno al precio del dólar. Y, debe decirse, este temblor cambiario no es exclusivo de Argentina: el billete verde está subiendo casi en todas partes, y en el mercado local la variación es extrema por la gran desconfianza política que hay en Argentina.
Pero la ebullición del mercado local se dio ayer, con el blue tocando en la apertura un valor inédito de $ 48, para luego ir día, pero quedando de igual modo en valores récord.
Finalmente, contra los cierres del miércoles, hubo un salto de $ 1,21 para el dólar oficial, hasta $ 46,13, una suba de $ 1,50 para el blue, hasta $ 46, y una de 95 centavos para el dólar mayorista, hasta $ 44,90, todavía por debajo de la mitad de la banda cambiaria.
Debe decirse que buena parte de la baja final del dólar tuvo que ver con movimiento del BCRA y de Economía. La tasa de las Leliq voló: pagaron 72,252% anual promedio y tasa máximo del 73%. Pese a lo cual hubo una leve baja en la tasa de los plazos fijos: pagaron 46% por plata chica y 51% por plata grande.
Por su parte, Hacienda colocó dos letras del Tesoro en moneda local por un equivalente a US$ 1.461 millones. En la licitación de letras del Tesoro Capitalizables (Lecap) a 80 días se colocaron $ 65.000 millones (US$ 1,441,2 millones) a un precio de corte de $ 978,04, lo cual representa una tasa nominal anual del 60,92%. Mientras que para las denominadas letras Lecer, ajustadas por inflación a 122 días, se adjudicaron $ 887 millones (US$ 20 millones), con un precio de corte de $ 1.012,5, lo que representa una tasa nominal anual del 15,6%.
Además, el Banco Central realizó las dos licitaciones diarias de ventas de US$ 30 millones cada una, por cuenta del Tesoro, y eso tuvo impacto sobre el vuelo del mercado. Además, por pago de cupones, el BCRA perdió en el día reservas por US$ 248 millones por lo que le quedan US$ 72.081 millones.
Pero donde también se vio un gran ida y vuelta en las cotizaciones fue en los títulos argentinos, tanto en las acciones como en los bonos. En la apertura llegaron a verse bajas en los títulos públicos que llegaban al 3%, por lo que en ese momento el riesgo país llegó a estar a 1.020 puntos. Pero a lo largo de la tarde aparecieron órdenes de compra que dieron vuelta al mercado, por lo que los bonos, contra el cierre del miércoles, terminaron 1% arriba.
Hubo órdenes de compra supuestamente de oportunidad, ya que había títulos tan baratos que llegaron a tener 23% anual de tasa a vencimiento, comenzaron a barrer todo lo que estaba demasiado barato.
Finalmente, el 82% de lo operado en bonos se transó en cinco papeles: AY24 54%, A2J9X 11%, DICA 7%, AO20 6% y TC20 4%. Y, reiteramos, con alto volumen negociado, tras un día a los saltos, los bonos argentinos terminaron repuntando casi 1%.
Las acciones también tuvieron un ida y vuelta, pero no llegaron a recuperar tanto como para quedar en positivo, siquiera medidas en pesos. Finalmente, luego de estar 4,4% abajo en pesos y 6,3% abajo en dólares en la apertura, con el mayor volumen diario de las últimas nueve semanas ($ 1.298 millones), el índice S&P Merval bajó apenas 0,6% en pesos
El 80% de lo operado en acciones se transó en diez papeles: G.F. Galicia tuvo el 27% de todo el dinero operado, Petrobras Brasil el 15% y mucho más abajo Supervielle e YPF tuvieron el 6% cada una. En los extremos se vio un salto del 18% para Costanera, y subas del 4% al 12% para Indupa, Longvie, Hipotecario, Supervielle, Cuyana, Mirgor, Edenor, Comercial del Plata, Camuzzi, Phoenix, Agrometal y Celulosa. Con bajas del 2,5% al 6,5% para Colorín, Rosenbusch, Grimoldi, Havanna, San Miguel, Carboclor, Loma Negra, Molinos y Ledesma.
Entre los ADR argentinos que cotizan en Nueva York hubo alzas del 2% al 2,6% para Irsa I y Edenor; y bajas de entre 1% y 5% para Bunge, Telecom, Macro, Tenaris, TGS, Galicia, Globant, YPF, Ternium e Irsa P.
Esta alteración en Buenos Aires se dio con un Wall Street mixto: el Nasdaq subió 0,2%, pero el S&P bajó 0,1% y el Dow cayó 0,5% Al tiempo que la Bolsa de San Pablo subió 1,6% y la de México retrocedió 0,1%.
En el mercado avisaban que uno de los que compraron papeles en la parte final del día fue la Administración Nacional de Seguridad Social que encontró que el bono AY24, que pagará cupón y amortización el 7 de mayo, se convierte en una inversión ideal.
Sea lo que sea, el riesgo país de Argentina tocó ayer los 1.000 puntos, ya muy cerca de los 1.200 que tuvo Cristina a comienzos de 2014 y todavía lejos de los casi 2.000 puntos que también tuvo CFK en 2009.
Frente a todos estos movimientos, las commodities entregaron algunas noticias buenas para la Argentina. El petróleo volvió a retroceder: bajó 1,1% hasta US$ 65 por barril. Los metales preciosos estuvieron firmes: el oro subió 0,2% y la onza de plata cerró sin cambios. Los metales básicos actuaron en baja: aluminio y níquel perdieron 0,8% y el cobre bajó 1,5%. En Chicago hubo una suba del 0,6% para el trigo, del 0,5% para la soja y del 0,2% para el maíz. En Rosario en dólares hubo suba del 1,1% para el trigo, del 0,9% para la soja y del 0,8% para el maíz. Y el bitcoin subió 0,9% con panel mixto para el resto de las criptomonedas.
