El Economista - 70 años
Versión digital

jue 28 Mar

BUE 26°C

Los bancos centrales cambiaron su política

Este año iba a continuar, o comenzar según el caso, el endurecimiento monetario pero está ocurriendo todo lo contrario

22 marzo de 2019

El miércoles, la Reserva Federal y el Banco Central de Brasil decidieron lo mismo: no tocar la tasa de interés. Pero no se trata de casos aislados sino de una tendencia global porque se asiste a una reversión de las estrategias monetarias imperantes hasta fines del año pasado.

En 2018, la Fed subió la tasa en cuatro oportunidades, una por trimestre, y pensaba realizar otras dos o tres durante 2019. Pero finalmente no habrá ninguna. El BCE anunció a mediados del año pasado que en diciembre dejaría de comprar activos y proyectaba subir la tasa luego del verano boreal. Pero ya dejó en claro que no tocará la tasa hasta 2020 y, además, a partir de septiembre volverá a poner en marcha estímulos monetarios. Las autoridades monetarias de China también están llevando adelante políticas más expansivas. En los últimos días, bancos centrales de todas las regiones del mundo anunciaron que dejarán las tasas en su actual nivel. Así ocurrió en Suiza, Corea del Sur, Suecia, Indonesia, Dinamarca y Filipinas, entre otros países.

La desaceleración económica y las tasas de inflación por debajo de las metas obligó a revisar las estrategias en casi todos los países.

Sin lugar a dudas, los anuncios de políticas monetarias más restrictivas resultaron ser una largada en falso. La causa de la reversión es la desaceleración de la actividad en las principales economías dado que se estima que Estados Unidos, China y la zona euro crecerán a tasas menores que en 2018. Otros países, como Brasil, solo mostrarán mejoras moderadas. La OCDE recortó su pronóstico de crecimiento global de 3,5% a 3,3%.

El otro factor que influye en la decisión de los bancos son las tasas de inflación estables o con tendencia decreciente que no logran alcanzar las respectivas metas. En la zona euro, la inflación está lejos de la meta que fue establecida “cerca pero por debajo del 2%”, en Estados Unidos suba del índice de precios de los gastos en consumos personales será de 1,8%, también por debajo de la meta de 2%. En el caso de Brasil, la tasa central de la meta es de 4,25% pero los analistas estiman que la suba del Indice de Precios al Consumidor Amplio no llegará al 4%.

En pocos meses, la orientación de los bancos centrales cambió completamente de dirección. De discutirse sobre cuándo y cuánto endurecerían su política monetaria se pasó a debatir cuál será su contribución para que no se profundice la desaceleración. Muchos analistas estiman que en términos de actividad lo peor se verá en el primer trimestre y que en el segundo semestre (en versión global) será mejor. Si es así, habrá una nueva ronda de discusiones sobre la estrategia que deberán seguir los bancos centrales.

De todas maneras, algunos analistas también advierten sobre los riesgos de las tasas de interés tan bajas porque los bancos centrales se quedan sin municiones para enfrentar un empeoramiento de las condiciones económicas. En el caso específico de la Fed hay, además, un debate sobre si la tasa de interés actual es neutral, es decir que ni frena ni estimula el crecimiento. Si fuese así, y es lo que parece creer Jay Powell, sería más baja en términos reales que las que había al término de los anteriores ciclos alcistas de la tasa.

Seguí leyendo

Enterate primero

Economía + las noticias de Argentina y del mundo en tu correo

Indica tus temas de interés