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Dujovne, optimista; González Fraga, moderado y Dal Poggetto advierte

21 marzo de 2019

Que los economistas digan cosas distintas sobre el mismo fenómeno suele ser algo clásico y una lógica de la que no escapan las ciencias sociales (y la economía, siempre vale recordarlo) es una de ellas. Ayer pasó algo en esa línea. Tres economistas importantes, cada uno desde su lugar, dieron su visión sobre el estado de cosas y no coincidieron.

El primero fue Nicolás Dujovne, quien tiene las riendas (aunque ahora colegiadas con el FMI) de la economía de Argentina. En un extenso diálogo en La Red, sugirió (sin decirlo) que lo peor ya pasó. “Nosotros pensamos que la economía hizo piso en noviembre y estamos recuperando, y se ve mes a mes (?) La economía se está recuperando gradualmente (?) Mes a mes vamos a ir mejorando, los salarios tuvieron una suba importante producto de las cláusulas de revisión, más el bono, en abril y mayo se cierran las paritarias y una inflación que empieza a ceder, porque ya no hay aumento de tarifas, la economía se va a seguir expandiendo, sobre bases sólidas”, sostuvo el ministro de Hacienda. Además, volvió a mencionar la pesada herencia y los “palos en la rueda” que puso la oposición en los últimos años, criticó los pergaminos de gestor económico de Roberto Lavagna, ponderó que Argentina atravesó la crisis de 2018 sin cambiar las reglas de juego ni tomar atajos y señaló que los desequilibrios macroeconómicos se están corrigiendo. En el mercado, y en otros espacios también, no cayó bien el discurso. “¿Y de Argentina dijo algo? Parecía que hablaba de otro país”, dijo un operador ante El Economista.

Más cauto fue Javier González Fraga, presidente del Banco Nación. En un evento de Forbes, el banquero dijo: “Hoy estamos mejor que en marzo de 2018. Sé que ésta no es la sensación ni lo que se vive en la calle. Tampoco voy a decir 'lo peor ya pasó' porque mucha gente no lo ve así. Pero la circunstancia es otra. ¿Qué prefieren, estar en un auto a más de 100 kilómetros que va hacia la pared o haber chocado con la pared y no tener más que un par de huesos rotos? Chocamos, pero estamos vivos”, expresó, a su manera. Además de defender el estado del Banco Nación (“estoy orgulloso de lo que hemos hecho”, dijo), también ponderó la curación de los desequilibrios macro: “Teníamos un déficit fiscal abultado y hoy apuntamos a cero. Teníamos un déficit de cuenta corriente de 5 puntos y hoy dimos vuelta el déficit turístico, el comercial y tenemos una mucha menos fuga de capitales. Había U$S 50.000 millones en Lebac no bancarias y la política monetaria estaba en manos de particulares; hoy está en manos del BCRA porque las Leliq son bancarias”.

Por último, en el mismo evento de Forbes, Marina Dal Poggetto (Eco Go) advirtió que los “brotes verdes” de los últimos meses podrían haberse marchitado. “Si había algún brote verde, ya se está marchitando”, dijo la economista y agregó: “El segundo acuerdo con el FMI te alejó de un riesgo cierto de espiral inflacionario y default. Te alejó del precipicio, pero te metió en una 'macroeconomía horrible' para enfrentar un año electoral”, graficó.

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