Por Luis Varela
Con un día particularmente tranquilo en los mercados internacionales (a pesar de que se postergaría la reunión entre Trump y Xi Jinping y a que Theresa May se quedó sin chances de resucitar el Brexit), la plaza financiera argentina se destacó claramente como la mejor de todas.
Sin que se vea ningún tipo de avance en las disputas entre Estados Unidos y China o entre Gran Bretaña y la Unión Europea, las bolsas del mundo tuvieron un lunes ciertamente en calma: hubo subas del 0,2% al 0,4% para los índices de la Bolsa de Nueva York y también se anotaron avances del 0,9% en la de San Pablo y del 1% en la de México.
Con ese marco internacional levemente tranquilo y positivo, las cabezas de los inversores internacionales volvieron a mirar hacia Argentina , a la que el Fondo Monetario Internacional dio su veredicto positivo sobre la marcha del programa, aunque advirtiendo que la todavía persistente inflación obligará a que el ajuste se deba seguir profundizando.
De esa manera, a la espera de las subastas de a US$ 60 millones por día que empezará a vender el Tesoro a partir de abril, el mercado cambiario local abrió el lunes con el dólar claramente hacia abajo, con un precio que fue de menor a mayor, a medida que se fueron conociendo las tasas de interés que aplicó el BCRA para las Leliq y los bancos para los plazos fijos. Mientras se difundió que, según Consumidores Libres, la canasta de alimentos subió 3,62% durante marzo, con informes económicos señalando que la economía argentina se contrae mientras el resto de la región crece, el dólar abrió el lunes muy tranquilo, colocándose incluso debajo de los $ 40, pero con valores sostenidos a medida que la tasa de interés se fue conociendo.
En definitiva, el BCRA decidió que las Leliq pagaran 63,629% anual promedio, al tiempo que las tasas de los plazos fijos subieron al mayor nivel de los últimos 45 días, pagando nada menos que 42% anual por depósitos de plata chica y hasta 46% anual por colocaciones de plata grande.
Con ese contexto, el dólar minorista oficial bajó 11 centavos respecto del cierre del viernes, hasta $ 41,02, con el blue quieto en $ 41. Y con el dólar mayorista cerrando sin cambios en $ 40, 94 centavos por encima del piso de la banda cambiaria, que hasta fin de mes crece a un ritmo mensual del 2%, pero desde abril irá escalando 1,75% cada 30 días.
Así, varios de los expertos más consultados de la city afirmaron ayer que es altamente posible que “en lo que sigue de la campaña electoral tengamos algunas semanas con el dólar en calma, dependiendo más que nada de lo que vaya sucediendo en el cronograma de elecciones provinciales”.
Obviamente, la tranquilidad que tuvo el dólar ayer también fue beneficiada porque en el exterior el dólar bajó contra casi todas las monedas, salvo contra la libra esterlina, que cedió más, ya que crece la incertidumbre acerca de lo que ocurrirá entre Gran Bretaña y la Unión Europea a partir del 1° de abril.
Pero más allá de todo lo que pueda decirse sobre el dólar y las tasas de interés, lo que cambió de cabo a rabo fue el tablero de los títulos argentinos: después de algunas semanas de intranquilidad, ayer fue un lunes en el que hubo buena cantidad de negocios y precios claramente hacia arriba tanto para los bonos argentinos y sobre todo para las acciones que cotizan en la Bolsa de Buenos Aires.
Mientras en el exterior se vio una mejora para los bonos de Grecia, Portugal y Hong Kong, los bonos argentinos lograron reunir un buen volumen de negocios y, lo más importante, tuvieron una interesante mejora en los precios (más del 1%) que los colocó en la mejor cotización de lo que va de marzo.
El 80% de lo operado en bonos se transó en tres papeles: AY24 62%, AO20 11% y DICP 8%. Y en los extremos se vio un salto del 4,2% para el bono BDC24 y alzas entre 1% y 2,3% para BDC22, AA37C, DICAD, BDC28, PBA25, DICAC, DICA, PARP y TVPP. Y bajas del 1% al 2,7% para los bonos TVPE, PARY, BPMD, PR13, PUO19, AM20 y TVPY.
Pero la estrella del día, sin dudas, fue la Bolsa porteña. Mientras Wall Street y las bolsas de la región mejoraron entre 0,3 y 1%, el índice Merval de papeles líderes pegó un salto de casi 3% y con un volumen de negocios de $ 816 millones.
El 80% de lo operado en acciones se transó en once papeles: Pampa Energía tuvo el 15% de los negocios totales, Galicia el 14%, Petrobras Brasil el 10% y Central Puerto el 8%. Y con esa estructura en los precios se registraron subas del 2% al 8% para Havanna, Colorín, Pampa E, Central Puerto, Supervielle, G F Galicia, TGS, Ternium, Macro, Frances, Petrobras Brasil, Richmond, Garovaglio y Consultatio. Con bajas del 2% al 7,7% para Grimoldi, Introductora, Mirgor, Indupa, Dycasa, Capex, Boldt, Clarín, Longvie y Patagonia.
Mientras que los ADR argentinos que cotizan en Nueva York anotaron avances del 1% al 6,6% para Pampa E, Irsa P, Francés, Edenor, Macro, Irsa I, TGS, Galicia, Telecom, YPF, Ternium y Tenaris; con baja del 1 al 2% para Bunge y Globant.
Por último, la debilidad del dólar volvió a fortalecer a algunas commodities. El petróleo ganó otro 1% y terminó a casi US$ 59 por barril. Los metales preciosos estuvieron firmes: el oro subió 0,1% y la onza de plata mejoró 0,4%. Los metales básicos actuaron sostenidos: el cobre cerró sin cambios pero hubo suba del 0,6% para el níquel y el aluminio trepó 1,5%. Pero los granos estuvieron en baja en Chicago: el trigo perdió 1,2%, con el maíz 0,5% abajo y la soja 0,4% en baja. Y en Rosario hubo un repunte del 3% para el trigo, y suba del 0,8% para el maíz, con la soja quieta. Se registró un salto del 2,2% para el bitcoin y panel tranquilo para el resto de las criptomonedas (y afirman que su era ya terminó).
