Con la economía fuera de la cancha y la inseguridad sin poder enarbolarse como una bandera electoral tan potente, “tenemos la sensación de que el principal argumento proselitista con el que contará el oficialismo seguirá siendo que Cambiemos constituye la alternativa más eficaz para bloquear el regreso de Cristina a la Casa Rosada”, dice Federico Muñoz en su último reporte.
“Una amplia mayoría de la población la identifica con el chavismo venezolano y lo cierto es que desde el propio kirchnerismo no se preocupan por desmentir esta asociación”, agrega Muñoz en referencia a la posición que expresaron los legisladores de ese espacio durante la semana.
“De la capacidad del electorado de discernir esta encrucijada dependerá en buena medida el derrotero de la economía nacional en la próxima década”, señala. Acaso, la nueva fase en la que ha ingresado el régimen de Nicolás Maduro, y la postura del kirchnerismo, aparecen como una aliada para Cambiemos para despertar miedo (infundado, según varios expertos, pero miedo al fin) de lo que podría ser un tercer turno de Cristina en la Casa Rosada.
