El Citi emitió un informe sobre Argentina y, lógicamente, las perspectivas electorales estuvieron presentes toda vez que abren escenarios casi binarios para 2020 y más allá. El reporte, firmado por Fernando Jorge Díaz, se la juega: “Esperen ruido, pero (Mauricio) Macri será reelecto”.
“Nuestra opinión se basa en dos factores”, dice la nota. “Si bien su popularidad sufrió en 2018 como resultado de los resultados económicos negativos, se mantiene en un nivel decente y, segundo, la oposición no kirchnerista no tiene candidatos atractivos”, argumenta.
Sobre la base de un cálculo econométrico en base a índices de la Universidad Torcuato Di Tella (el Índice de Confianza del Consumidor y el Índice de Confianza en el Gobierno), el reporte dice: “Macri sigue disfrutando de algún tipo de luna de miel”. Es decir, todavía tiene crédito.
“Macri no es de ninguna manera un presidente impopular para la media histórica”, agrega Díaz. En base a esos indicadores, dice: “En los niveles actuales, la intención del voto de Cambiemos debería ser de alrededor del 35%, que es consistente con la mayoría de las encuestas de opinión confiables disponibles”. A su vez, “si la economía se recupera, como esperamos, estas medidas deberían mejorar para el Presidente”. Sobre eso, el reporte dice: “Lo peor ya pasó y veremos crecimiento intertrimestral desde el primer trimestre”.
Además, “observamos que, si bien la popularidad del Gobierno ha disminuido, los políticos de la oposición no han capitalizado en esta caída, algo que aumenta la probabilidad de que estos votantes terminen apoyando a Cambiemos”. Algo similar, observa el reporte, pasó en 2017 cuando Cambiemos obtuvo números mejores a los esperados.
Según Díaz, Argentina se encamina hacia una segunda vuelta porque Macri no sacará 40% y 10 puntos de ventaja sobre el segundo ni tampoco llegará a 45%. A la vez, considera que Cristina “jugará” y que eso eleva las posibilidades de Macri. “La imagen negativa de Cristina es alta y por eso su partido ha sido derrotado en las últimas tres elecciones: 2013, 2015 y 2017”. Sin embargo, dice Díaz, “si no se postula y Macri se enfrenta a un candidato moderado en una segunda vuelta, entonces las posibilidades de Cambiemos serían menores”. El tema allí es que los moderados no tienen la potencia suficiente para llegar a esa instancia. “Un candidato alternativo por fuera kirchnerismo podría obtener algunos de los votos anti Cristina que, de lo contrario, irían a Cambiemos”, explica.
El reporte arguye que Cristina competirá por que “siempre lo hizo”: 2005, 2007, 2011 y 2017. Además, cerca suyo la presionarán porque es quien más bancas puede conseguir en el Congreso toda vez que se espera que haga una elección potente el 27 de octubre.
Un factor que jugará en contra de las aspiraciones cristinistas, además de la imagen negativa, es el calendario y, específicamente, las PASO. Si Cristina hace una elección fuerte en esa instancia, los votos del tercero irán hacia el segundo, es decir, el mejor posicionado para evitar que ella regresa a la Casa Rosada, algo que sólo hicieron Julio A. Roca, Hipólito Yrigoyen y Juan D. Perón.
“En resumen, 2019 será un año con una actividad política muy intensa, incluso para los estándares del país (?) pero al final esperamos que Cambiemos gane las elecciones”, dice Díaz, y proyecta que, aun así, no controlará ninguna cámara del Congreso.
