En diálogo con agencias internacionales, el ministro de Hacienda y Finanzas, Nicolás Dujovne, confirmó hoy que el Gobierno solicitó al FMI remover del acuerdo firmado la recompra de Letras Intransferibles del Tesoro al BCRA originalmente contemplada.
Dujovne, asimismo, confirmó que acordó con el FMI que se liberen efectivamente en septiembre los US$ 3.000 millones disponibles para el trimestre de la línea de crédito Stand-By, en lugar de mantenerlos con carácter meramente precautorio. Buscó, asimismo, despejar dudas sobre las posibilidades de cumplimiento del Programa Financiero, evaluando que “los spreads de los bonos argentinos exageran absolutamente nuestro nivel de riesgo y no reflejan adecuadamente los fundamentals ni el nivel de financiamiento que tiene Argentina”.
Además, el funcionario realizó varios comentarios y proyecciones en materia económica. “Por supuesto que el crecimiento ha sido menor al que esperábamos”, reconoció al estimar que el PIB retrocederá 1% en 2018 culpando al “impacto directo de la sequía”, aunque vaticinó una leve recuperación para 2019, con un crecimiento de 1,5%.
El ministro también señaló que la meta fiscal, que estipula un déficit primario no mayor a 2,7% del PIB para 2018, “es irrenunciable” y que espera también un menor desequilibrio en el frente externo, con el déficit de cuenta corriente situándose en torno al 3% del PIB, lo que implicaría un ajuste de 2,3 puntos porcentuales respecto a 2017, cuando alcanzó 5,3%.
Dijo que la meta fiscal “es irrenunciable”
En el memo presentado en junio al organismo con sede en Washington, se advertía que “bajo las dos administraciones anteriores, la hoja de balance del BCRA se vio seriamente comprometida”, a la vez que se explicitaba la intención de darle mayor solidez. Al respecto, se proponía, entre otras medidas, “recomprar gradualmente una porción significativa de Letras Intransferibles del Ministerio de Hacienda” en poder del BCRA. “El objetivo es reducir la deuda neta en por lo menos USD 25.000 millones para mayo de 2021”, rezaba el documento, que lleva la firma del propio Dujovne y del entonces presidente de la autoridad monetaria, Federico Sturzenegger. “Desde el acuerdo hasta acá, el Tesoro sólo le rescató al BCRA $26.000 millones”, advierte Leandro Zicca, economista del Instituto de Capacitación Bursátil (ICB).
El memo sugería que los fondos obtenidos por Reconquista 266 a través de la recompra de letras de Hacienda acompañarían el desarme del stock de Lebac (una medida con la que Luis Caputo ya comenzó a avanzar), facilitándole la tarea de quitar pesos del mercado. “Pero toda vez que la autoridad monetaria avanzó con un programa con fondos propios para la cancelación de Lebac, consideramos junto con el FMI que ya no era relevante mantenerlo", justificó Dujovne.
El Gobierno, de esa manera, focaliza su atención en acatar la meta fiscal acordada con el FMI en detrimento del cumplimiento otras condiciones que considera de segundo orden, como la de no superar el 32% de inflación interanual o la mencionada recompra de Letras Intransferibles del Tesoro.
