Siguen sumándose las señales de la crisis. La actividad industrial se desplomó 8,1% interanual en junio. Según informó esta tarde el Indec, con este dato el Estimador Mensual Industrial (EMI) acumuló en el primer semestre un aumento de 1% contra el mismo período de 2017.
El retroceso de junio fue generalizado. El derrumbe mayor se dio en la refinación del petróleo (19,9%); seguida de la industria automotriz (11,8%); los productos de caucho y plástico (11,1%); la metalmecánica, excluida la industria automotriz (10,9%); la industria textil (10,8%); la elaboración de sustancias y productos químicos (10%); la industria del tabaco (9,7%). También cayeron la industria alimenticia (5,4%); la edición e impresión (4,2%); los productos minerales no metálicos (3,7%) y el bloque de
papel y cartón (1,2%).
La única rama que tuvo un rendimiento positivo fue la industria metálica básica que registró una suba del 9,8%.
El combo devaluación, tasas altas y caída del salario real, sumado a otros problemas que afectan sectorialmente, como la sequía, fue letal para la industria que ya venía en retroceso desde mayo (1,2% interanual).
Hacia delante
En cuanto a la encuesta cualitativa, que mide expectativas de las empresas, el 45,8% espera una baja para el tercer trimestre; 41,2% prevé un ritmo estable y 13% espera un aumento.
Entre las compañías exportadoras, el 49% no prevé cambios en sus ventas al exterior para el tercer trimestre; 33,3% espera una suba y 17,7% vislumbra una disminución.
El 54,1% de las firmas no anticipa cambios en los stocks de productos terminados; 24,5% anticipa una suba y 21,4% espera una disminución.
El 70,4% de las empresas no proyecta cambios en la dotación de personal durante el tercer trimestre; 21% anticipa una disminución y 8,6% prevé un aumento.
