La crisis cambiaria, que se desató a fines de abril y tuvo hoy su día más negro, pulverizó el valor del peso. El tipo de cambio casi se duplicó en los últimos doce meses: subió 95% al pasar de $17,64 el 29 de agosto 2017 a los actuales $34,40.
El grueso de la escalada corresponde a este año. Desde el 29 de diciembre (último día hábil de 2017), cuando cerró a $18,92, el dólar saltó 81,8%. Y sólo desde el 25 de abril, casi 70%.
Hace cuatro meses que el tipo de cambio sube aceleradamente, con la excepción de julio. Una combinación de desequilibrios externos estructurales, una crisis de confianza, apreciación internacional de dólar y errores políticos conspiraron contra la moneda nacional. El resultado: una escalada inflacionaria que ya tiene como piso el 35% para 2018, una fuerte caída del poder adquisitivo de los salarios, la consecuente suba de la pobreza y la profundización de la recesión en curso.
Hoy, Mauricio Macri anunció un acuerdo con el FMI para adelantar “todos los fondos necesarios” para garantizar el cumplimiento del programa financiero de 2019 y devolver la confianza, pero no dio demasiadas precisiones. Esto reforzó el descrédito del mercado y el dólar se disparó 8,4% a $34,40.
