El EMAE del Indec ya dio claras señales de la crisis. En mayo, el mes del comienzo de la corrida cambiaria, la economía se desplomó 5,8% interanual. En la serie desestacionalizada, la actividad se contrajo 1,4% contra abril, según informó esta tarde el organismo que conduce Jorge Todesca. Pesó el impacto de la sequía en el agro, que cayó 35,2% interanual.
Además, el acumulado de los primeros cinco meses del año marca un alza de apenas 0,6%, y ya siembra dudas sobre si el año cerrará en terreno positivo (el FMI proyectó una expansión de 0,4% para Argentina durante 2018).
“Agricultura, ganadería, caza y silvicultura” fue la rama de actividad de mayor incidencia en la contracción anual del EMAE en mayo. A raíz de la sequía que golpeó al campo, el sector se derrumbó 35,2%, que significó una incidencia negativa de 5,76 puntos en el nivel general.
Las otras ramas que más contribuyeron al desplome de la economía fueron “Transporte y comunicaciones” (4,9%), “Industria manufacturera” (1,4%) y “Pesca” (29,2%).
En la otra vereda, las de mayor incidencia positivo fueron “Actividades inmobiliarias, empresariales y de alquiler” (4%), “Intermediación financiera” (10,8%) y “Construcción” (4,4%), aunque mostró una importante desaceleración respecto de los meses anteriores en los que crecía por encima del 10%.
