De acá al miércoles la oposición decidirá la estrategia para la sesión ordinaria en la que estará en discusión la emergencia ocupacional. Luego de que el Frente para la Victoria fracasara en su intento de tratar el proyecto en sesión especial, retomaron los diálogos con el Frente Renovador, de Sergio Massa. Este último propone la ley antidespidos sumando beneficios para las pymes; es decir, si se aprueba deberá volver al Senado.
El tigrense, quien invitó a su interbloque a no participar de la sesión convocada por el kircherismo y fue apoyado por todos, salvo Hector Daer, es quien define esta situación que ya lleva casi un mes y le cambio la agenda al Gobierno. Pudo resolver las internas que sufrió su interbloque por el tema en cuestión y mantuvo cautela siempre hasta último momento para definir su posición. Esperan que el FpV resuelva acompañar su dictamen.
Frente para la Victoria
Héctor Recalde, jefe del bloque del FpV en Diputados, visitará hoy a su par en el Senado, Miguel Angel Pichetto, para definir la posición que tomará el kirchnerismo: si deciden acompañar al massismo luego de haber sido plantados en la sesión especial o si insisten en su dictamen. De apoyar al interbloque de Massa y ser aprobado, el proyecto deberá regresar a la Cámara Alta, donde el FpV-PJ cuenta con 39 senadores, Massa con 2 y Cambiemos con 15. Cuando el líder del Frente Renovador visitó a Pichetto, se había acordado aprobar la ley tal como venía del Senado y luego discutir beneficios para las pymes. El escenario cambió, el massismo no quiso ser parte “de una maniobra del kirchnerismo” según manifestaron y es ahora quién tiene la clave para resolver el conflicto.
Juliana Di Tullio, diputada del FpV, admitió que el massismo los dejó “en una encerrona compleja” y agregó que se encuentran en negociaciones. “No hay un solo camino, no es modificaciones sí o sí o se terminó”, definió la legisladora en Radio Mitre y sostuvo que “hay que volver a hablar con las centrales sindicales para ver qué quieren y hay que hablar con el Senado para ver si acepta cambio”. “No es momento de definiciones, es momento de más diálogo” remarcó Di Tullio.
Sesión ordinaria
En la sesión convocada por el presidente de la Cámara, Emilio Monzó, los primeros proyectos a debatir serán la ley de Acceso a la Información Pública y el reintegro de IVA a las familias vulnerables. Ambos cuentan con un amplio respaldo, en especial el primero, que fue elogiada por el FpV. El reintegro de IVA, en parte, fue criticado por su monto e implementación, sin embargo será aprobado de manera holgada. El oficialismo impulsará además, autorizar el procedimiento judicial contra Julio De Vido que por sus fueros como diputado evito que le allanen su domicilio. El diputado, está procesado en la causa por la tragedia de Once. Cuando ocurrió era el ministro de Planificación. Eduardo Amadeo, diputado de Cambiemos declaró que van a pedir votación nominal “para que cada uno diga de qué lado está” y advirtió que ahí “le vamos a contar las costillas a ver quién está de qué lado”.
Por cantidad de firmas obtenidas, el primer proyecto antidespidos en ser tratado será el dictamen que el FpV quiso discutir el pasado jueves en sesión especial. Es el proyecto que ya cuenta con media sanción del Senado prohíbe los despidos por 180 días e incluye la doble indemnización. De no alcanzar los votos requeridos pasará a lugar el dictamen de Cambiemos, que es en rechazo del proyecto. Se prevé que ambos fracasen en su intento y así llegará el tercero, perteneciente al massismo, que contó con diez firmas, entre ellas la de Facundo Moyano. Con 37 diputados, esperan además del apoyo del FpV y del bloque Justicialista que integra Diego Bossio, el del Frente Progresista, el Frente Cívico de Santiago y el Compromiso Federal de San Luis, entre otros bloques que no le prestaron quórum al FpV. Para comenzar el debate de la ley antidespidos, primero el tema deberá ser aprobado por dos tercios del recinto, debido a que no van a haber pasado siete días de la aprobación del dictamen.
El Gobierno encuentra en el proyecto de Massa otro argumento para justificar el veto: el costo fiscal que traería. Según estipulan en Casa Rosada y fue confirmado en el Frente Renovador, el costó de la ley sería de $50.000 millones. Igualmente el veto podrá ser en particular, eliminando ciertos artículos de la ley. Gabriela Michetti, en su gira por Corea del Sur, definió la postura de la oposición como especulativa y con el fin “de lograr que a Argentina no le vaya bien”. “Lo que están haciendo es boicotear el progreso de los argentinos, no del Gobierno”, definió la vicepresidenta en entrevistas con La Nación y Clarín y señaló que “los números del empleo nos dicen que no hay crisis actual”.
