La Gerencia de Estudios Económicos de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) difundió un informe interesante con foco en el largo plazo y un título sugerentes: “Alcanzando el potencial del agro argentino”. A continuación, los puntos principales.
“Argentina cuenta con una posición privilegiada como proveedor de alimentos y materias primas de origen vegetal y animal a nivel mundial gracias a sus ventajas competitivas en materia de disponibilidad de suelos, factores climáticos y capacidad empresaria. Estas condiciones se vieron beneficiadas en las últimas décadas por un contexto internacional favorable en el marco del proceso de convergencia de las economías asiáticas, el crecimiento demográfico y el desarrollo de biomateriales y biocombustibles”, dice el reporte y agrega que “en los próximos años la Argentina tendrá una ventana de oportunidad para transformar su estructura productiva e insertarse en las cadenas globales de valor a través de su agroindustria”.
Entre los “debes”, dice la BCBA, “es necesario el desarrollo de marcos institucionales que promuevan la inversión y la incorporación de tecnología y la inversión en infraestructura para desarrollar una industria competitiva e integrada al mundo”.
En solo 25 años la producción de los tres principales cultivos (trigo, maíz y soja) pasó de 31,8 M/Tn a 111,5 M/Tn, un crecimiento anual promedio de 5,3%
Los escenarios elaborados por la BCBA muestra que Argentina tiene las capacidades de alcanzar los 200 millones de toneladas de granos en 2027. “Esa cifra surge de la combinación del cierre de la brecha de rendimientos de productores contra los rindes potenciales en secano (Nota de Redactor: sin riego) y mejoras de eficiencia en las cadenas logísticas”, sostiene.
Asimismo, el trabajo identifica que las mejoras del sistema logístico derramarían en mayor medida sobre la producción de maíz, que ganaría participación en el área agrícola. Esto favorecería la rotación de cultivos y contribuiría a la mejora de la sustentabilidad de nuestros sistemas productivos.
