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La CGT espera que el paro sea contundente

El triunvirato pretende neutralizar a los sectores más duros que cuestionan su conducción

24 septiembre de 2018

La CGT realizará mañana su cuarto paro general durante la gestión de Mauricio Macri para mostrar su disconformidad con la situación económica y el impacto de la política de Cambiemos en términos laborales y sociales. Y esperan que sea contundente, como se entusiasma el triunvirato. El apoyo a la medida por parte de los gremios del transporte y de los gremios más importantes del país garantizar ciertas condiciones en ese sentido. También el humor social adverso para el Gobierno, que ya muestran algunas encuestas. Sobre todo, en términos de expectativas.

A su vez, la conducción de la central obrera espera que la medida de fuerza sirva para contener a los sectores díscolos y neutralice el descontento creciente de los duros, que pretenden arrebatarle el control del secretariado general. Respecto del Gobierno, la central obrera espera que la administración de Cambiemos tome en cuenta parte de la multiplicidad de reclamos y que vuelva a tender puentes, en nuevas condiciones. La invitación del ministro de Producción, Dante Sica, de la semana pasada, no llegó en buen momento. El triunvirato no estaba dispuesto a mostrarse negociador antes de la realización del paro general.

“El mensaje al gobierno es que escuche la voz del pueblo, el martes va a ser un paro contundente para que el gobierno cambie la política económica. En los discursos dicen que vamos bien y la prueba que no es así está a la vista de todo el mundo”, señaló Carlos Acuña, del gremio de los trabajadores de estaciones de servicio, en declaraciones a Radio 10. Y agregó: “Lo único que le escucho decir al Presidente es que él quiere calmar a los sectores financieros. ¿Quién le calma el hambre a la gente? ¿Quién calma la falta de trabajo, las tarifas? ¿Quién calma todos esos problemas? Lo único que calma esos problemas es el trabajo. La posibilidad de tener un salario digno permite vivir con la familia como corresponde”.

Acuña es parte del triunvirato y forma parte de lote de dirigentes moderados. A pesar de algunos matices, comparte impronta con los otros dos integrantes del secretariado, Héctor Daer y Juan Carlos Schmid y con los referentes de los grandes gremios, conocidos como los “gordos” (Armando Cavalieri, de Comercio, y Rodolfo Daer, de Alimentación) y los autodenominados “independientes” (Gerardo Martínez, de UOCRA; Andrés Rodríguez, de UPCN, y José Luis Lingeri, de

Obras Sanitarias).

Más distantes de la conducción de la CGT y con una mirada más dura respecto del Gobierno está el moyanismo y la Corriente Federal de los Trabajadores, que tiene a Sergio Palazzo como su principal referente. A ellos se les suman las dos CTA, que convocaron a una medida de fuerza que arrancará a las 12 de hoy y que se prolongará hasta las 12 de la noche de mañana. Estos sectores confluyen en el Frente Sindical para el Modelo Nacional, una articulación de sectores gremiales cercanos al kirchnerismo. Ricardo Pignanelli, y acompañados además por Pablo Biró (Pilotos), Ricardo Cirielli (Técnicos Aeronaúticos), Omar Plaini (Canillitas), Miguel Ángel Díaz (Udocba), Leandro Fabre (APOPS) y Horacio Valdez (Vidrio) son otros actores que se ubican dentro de ese espacio.

En tanto, desde el Gobierno consideran que “no hay motivos” para la medida de fuerza, más allá de los contratiempos de su administración. Y señalan, como hicieron en ocasiones anteriores, las “pérdidas” que se generarán por esa jornada de protesta. “Si bien el paro es un derecho de los trabajadores que hay que respetar, es un día perdido para el trabajo en la Argentina y uno tiene que hacer el esfuerzo para evitar esta situación”, sostuvo el ministro del interior Rogelio Frigerio durante el fin de semana. Mientras espera sentarse junto al triunvirato en las próximas semanas.

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