Luego de ocho semanas consecutivas con correcciones al alza, los analistas del mercado en Brasil bajaron levemente la tasa de inflación esperada para 2018. La suba del Indice de Precios al Consumidor Amplio pasó de 4,17% a 4,15% en 2018 y se mantuvo en 4,10% para 2019. Así surge del informe Focus que elabora semanalmente el Banco de Brasil con las proyecciones de los analistas.
En cuanto a la tasa Selic, no se espera que haya modificaciones y que se mantenga en 6,5% a fin de año. Tampoco hubo variaciones cambiarias para 2018, y al igual que la semana pasada, se espera que el dólar cotice a 3,70 reales a fin de año. Pero, para 2019, el valor esperado pasó de 3,60 a 3,68 aunque se trata de pronósticos sujetos a lo que ocurra en el mercado global.
Por otra parte, se sigue ajustando a la baja la suba esperada del PIB de 2018, que pasó de 1,53% a 1,50%, aunque quedó en 2,50% para 219. Pero se registró una leve mejora en el pronóstico para la producción industrial que pasó de 2,65% a 2,96% en 2018 y se ajustó de 3,05% a 3% la suba esperada para 2019. A comienzos de año se apuntaba a un crecimiento de 3%, pero el contexto global también afectó a Brasil y esa proyección se redujo a la mitad. Curiosamente, el habitualmente más pesimista FMI proyecta una suba de 1,8% en 2018.
Por último, la balanza comercial se proyecta con un superávit de US$ 57.000 M en 2018 y US$ 49.300 M en 2019.
Más datos
Según el Indice de Actividad Económica que elabora el Banco Central de Brasil (IBC-Br), la actividad cayó 3,34% en mayo. La prolongada huelga de camioneros, que comenzó a fines de mayo, tuvo un impacto muy negativo y alteró la tendencia positiva que había mostrado el índice en abril cuando subió 0,5%. Todos los indicadores de actividad mostraron un descenso significativo durante mayo. Sin embargo, el IBC-Br registra una suba de 0,73% en 2018.
