El Economista - 70 años
Versión digital

jue 28 Mar

BUE 22°C

“Será necesario mantener tasas altas algunos meses más”

“En 4 o 5 años vamos a mirar para atrás y la inflación argentina va a ser la de un país normal”, dijo el titular del BCRA

30 noviembre de 2017

Por Mariano Cúparo Ortiz

El presidente del BCRA, Federico Sturzenegger, debe ser uno de los funcionarios que más difícil la tiene: cada una de sus apariciónes  genera una ola de críticas y respuestas, no sólo de los que tienen una visión opuesta de lo económico, sino también de los que están en la misma vereda. Ayer habló en el seminario que organizó Bank Magazine en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, y no fue la excepción.

Una de las frases de Sturzenegger fue título en algún que otro sitio web y dio mucho que hablar. Los títulos sostenían un entrecomillado supuestamente literal en el que decía “en 4 o 5 años tendremos la inflación de un país normal”. Y a partir de eso varios analistas salieron a criticarlo fuerte porque semejante declaración implicaría un abandono explícito de las metas de inflación, que se proponen llegar a una de 5% en 2019.

Hubo mucho rebote, pero lo cierto es que la frase que llegó a los titulares es sutilmente distinta a la que en realidad dijo el presidente de la autoridad monetaria, quien en realidad afirmó: “En cuatro o cinco años vamos a mirar para atrás y la inflación argentina va a ser la de un país normal. Vamos a decir 'tanto que hablamos de la inflación y que parecía tan difícil y al final pasó lo que pasó en cualquier país del mundo'”. Queda abierto a la interpretación. Pero a priori, pareciera que se refiere a que en cuatro o cinco años, desde su punto de vista, hará falta mirar hacia atrás para encontrar el momento en el que la inflación llegó a números normales.

Autobalance

La controversia llegó en la misma semana en la que Sturzenegger habría dicho ante banqueros, en Adeba, que el BCRA apunta a lograr una núcleo de 1% en abril, lo que para el grueso de los analistas representa prácticamente una rendición a la posibilidad de lograr el techo de 12% que persigue la meta de 2017. Al margen de esto, otra discusión es la de si los resultados obtenidos hasta ahora, y las expectativas inflacionarias que registran las encuestas, dan margen para pensar en que se cumplirán las metas.

Sturzenegger se refirió con optimismo a ambas: a las expectativas inflacionarias y al sendero de desaceleración observado hasta ahora. Sobre las primeras dijo: “Cuando en octubre de 2016 empezamos a relevar las expectativas de mercado, en una economía que tenía inflación del 45%, la gente dijo que en 2018 iba a ser de  14% y en 2019 de 9%. Esos fueron los primeros números que obtuvimos en el REM. Hoy las expectativas son una de 16% en 2018 y de 11% en 2019. Es decir se movieron 2 puntos. Llevamos la inflación de 45% a 22%. Y las expectativas no se mantuvieron en 14% ni convergieron a nuestra meta, pero están muy estables y muy consistentes con respecto a donde estábamos. Transcurrieron 13 meses y la gente piensa que el proceso sigue sólido en términos de desinflación”.

Al respecto cabe una aclaración: en realidad el REM no mide las expectativas de la gente en general, sino las de unos 55 economistas en particular. La Encuesta de Expectativas de Inflación de la UTDT, que se realiza con 1.200 consultados, muestra que a nivel nacional la inflación esperada para los próximos doce meses es 24,7%, según el promedio (y según la mediana 20).

La desinflación

El presidente del BCRA también mostró unos gráficos que dan cuenta de las curvas descendentes de la inflación general interanual (con algún vaivén) y de la núcleo (lenta pero sostenida). Sobre eso, dijo: “En varios IPOM hablamos de la persistencia de la núcleo. En los últimos meses está mostrando una desinflación. Es sostenido. En algunos momentos más rápido y en otros más despacio”.

Es posible una observación: los gráficos que mostró Sturzenegger mostraron la evolución desde junio de 2016, es decir, desde el pico inflacionario de una interanual de 45%. Por supuesto se ve caída desde ese punto pero no si se mira contra octubre de 2015 a través del IPC CABA, el índice oficial más comparable (en octubre de 2015 la interanual era 23,8% y en octubre de 2017 24,5%).

Gradualismo

Más allá de que parece ser equivocada la interpretación respecto a la frase en la que Sturzenegger habla del balance que hará la sociedad en cuatro o cinco años, si es que la inflación logra ser domada, pareciera que desde la autoridad monetaria tomaron nota de las críticas que varios analistas vienen haciendo en el sentido de que las metas son demasiado exigentes. Sobre todo con el contexto de unas metas fiscales mucho más graduales. Lo que dijo Sturzenegger ayer pretendió apuntar a alargar el plazo de la mirada. Como lo habría hecho en las declaraciones a los banqueros, estirando hasta abril el momento en el que será necesario llegar al 1% de la núcleo.

Aunque no se pueda bajar de las metas, ayer habló del gradualismo: “Lo elegimos en la desaceleración de la inflación porque sabíamos que iba a haber gradualismo fiscal y que por algún tiempo iba a haber transferencias del BCRA al Tesoro y por eso la coordinación de las metas que uno elige con el programa fiscal”.

Seguí leyendo

Enterate primero

Economía + las noticias de Argentina y del mundo en tu correo

Indica tus temas de interés