Mientras el Gobierno Nacional analiza la posibilidad de habilitar en noviembre un nuevo incremento en el precio de las naftas, uninforme de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines (CECHA) dado a conocer ayer muestra que los impuestos explican 43% del precio final que se paga por la nafta en estaciones de servicio de la ciudad de Buenos Aires. El 57% restante, en tanto, está explicado por el precio de compra contado del combustible, el margen de ganancia del expendedor y el costo del flete. Desagregada, esa carga tributaria corresponde mayormente al Impuesto a la Transferencia de Combustibles (ITC), que explica 24,33% del precio de la nafta en surtidores y más de la mitad del total de impuestos. A su vez, al IVA responde 12,76% del valor final y lo restante se divide entre Ingresos Brutos (2,62%), Tasa Hídrica (2,18%) e impuestos sobre los Débitos y Créditos Bancarios (0,85%). Por su parte, el precio de compra contado del combustible y el flete explican 48,44% y 1,1%, respectivamente, mientras que el margen de ganancia de expendedores asciende a apenas 7,72%.
De este modo, con un precio en surtidores de la nafta premium de $ 19,3 en la CABA según CECHA, se desprende que descontados los impuestos, el valor caería a $ 11,05.
Las mismas proporciones en la nafta premium y la super. Por tanto, con un valor de $ 17,08 por litro de la súper, el precio neto de impuestos cae a $ 9,76