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"Detrás de la caída de las Bolsas está China"

Entrevista a Miguel Boggiano, CEO de Carta Financiera

22 enero de 2016

("El nuevo escenario complica las perspectivas de plata fácil para Argentina porque deja de ser atractivo solamente nuestro país", señala Miguel Boggiano, CEO

En lo que va del año, las bolsas internacionales han caído bruscamente. ¿Hay una explicación común a ese fenómeno?

Claro, esto no tiene que ver con una cuestión propia de cada país sino que el principal factor detrás de esas caídas ha sido el temor mundial a una desaceleración de China. Cada vez se pone más en cuestionamiento las proyecciones crecimiento propias de China. Cuando uno cruza los datos de crecimiento de consumo de energía eléctrica y los datos de evolución del PIB esperada se lleva una sorpresa porque en principio no debieran distanciarse tanto y se espera un crecimiento del 6% del PIB pero el crecimiento del consumo eléctrico, que es más fácil de medir y más difícil de falsear, es del 1%.

¿La contracara de la desaceleración china será menores precios de las commodities?

Por supuesto esto también se traduce en una caída de los commodities, pero que ya viene dándose desde hace dos años. 2014 fue el año de gran caída de los agrícolas y 2015, el de la energía. Esperemos que 2016 no vuelva a ser desastroso para los agrícolas, que son los que más impactan en Argentina. Por otra parte, el petróleo ya está por debajo de 29 dólares y el crudo a niveles tan bajos también habla de expectativas de decrecimiento a nivel mundial. Hay una expansión de la oferta, con Estados Unidos ya como el principal productor petrolero del mundo por encima de Rusia y Arabia Saudita, y por el otro lado una caída de la demanda, especialmente por el lado de China. Y al mismo tiempo, en Estados Unidos, el viernes 15 hubo una sorpresa con algunos indicadores de actividad que dieron una contracción, algo que no pasaba desde 2008/09.

¿Qué consecuencias tiene este cuadro sobre Argentina?

Impacta en que antes tenías tres países que se distinguían en cuanto a rendimiento de bonos, que eran la propia Argentina, Venezuela y Ucrania. Pero hoy esa diferenciación no es tan marcada; de hecho, hay bonos de Brasil que están rindiendo más que algunos argentinos. Esto quiere decir que se están complicando las perspectivas de que entre plata fácilmente porque ya deja de ser atractivo solamente Argentina, Perú tuvo un aumento también del rendimiento de sus bonos, por ejemplo. Lo que pasó en los últimos días de 2015 fue que cayeron los precios de los bonos basura (junk bonds) y eso contagió la caída de otros bonos corporativos de mayor calidad e incluso ahora a bonos soberanos. Entonces, ahora vas a tener una diferenciación más grande donde antes no la tenías, entre por ejemplo Australia, Austria o Canadá, países que estaban teniendo un retorno implícito de los bonos comprimido entre 0 y 2%. Ahora vamos a ver una situación más normal, mientras que lo que habíamos estado viviendo era una situación de anormalidad generada en buena medida por siete años de tasas en cero impulsadas por la Reserva Federal de Estados Unidos.

¿Cómo juega en este contexto negativo la decisión de la Fed de subir las tasas y el gradualismo que ha elegido para hacerlo?

Para este año se esperaba que hubieran cuatro subas más, lo que dejaría la tasa en 1.25%, todavía un nivel increíblemente bajo. Es difícil que a esta altura haya un cambio pero no sé qué pasaría en caso de que otros indicadores estadounidenses dieran también contracción. Si eso sucede, quizás sea una salida aún más gradual.

¿Si ese fuera el caso, el fin de la etapa de dólar barato y commodities altas podría demorarse un poco más?

No sabemos si en caso de que Estados Unidos volviera a tener un contexto recesivo volvería a salir de la misma manera ni tampoco si tendría los mismos efectos una política como la que se puso en práctica, que consistió en inyectar dinero por todas partes. Hoy una profundización de la crisis significaría un fortalecimiento extra del dólar. Los bonos norteamericanos están subiendo, hay compra de bonos de 10 años, de 30 años, y eso es salida de otras monedas e ingreso al dólar e implica presión bajista para las commodities.

De todos modos, el fin de la hiperliquidez y el dólar barato es un hecho, ¿no es cierto?

Mucho va a depender de si se vuelve a generar crecimiento a nivel mundial y si se frena la desaceleración en China. Las commodities por lo general anticipan este tipo de cosas, y esta caída generalizada indica que la probabilidad de que el mundo entre en una recesión general está aumentando y preocupa.

Mientras tanto, los emergentes van a dejar de ser tan pujantes.

Los emergentes tienen una altísima correlación con lo que pase con las commodities. América Latina tiene una enorme correlación, pero Rusia también lo tiene. Probablemente India sea de los emergentes el que depende menos porque su crecimiento está más asociado a los servicios. China, por su parte, se beneficia de una caída de las commodities porque es importador de materias primas y exportador de productos con valor agregado. Lo que pasa es que está caída tiene que ver con una desaceleración generalizada, con lo cual a China se le va a hacer más difícil venderle a Estados Unidos, a Europa, a América Latina.

¿Qué se puede proyectar hacia el resto del año en materia bursátil?

Es muy difícil de decir. La caída ha sido muy abrupta; ha sido probablemente el peor comienzo de año del último siglo en la bolsa de Estados Unidos. Pero lo que tenemos hasta ahora es un mes de caída, todavía es prematuro para decir que estamos en un escenario bajista. Los índices norteamericanos están nada más que 10% abajo de máximos históricos, mientras que del techo del 2007 hasta el piso de marzo del 2009, la caída fue del 60%. Todavía estamos bastante lejos de un escenario de recesión global pero las bolsas siempre se anticipan y lo que están mostrando es que hay preocupación.

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