En el ámbito de la Facultad de Derecho de la UBA, el Foro de Convergencia Empresarial dio a conocer esta semana su posición frente al papel que debe tener el Estado. Es un dato positivo que 67 entidades se hayan puesto de acuerdo para fijar una posición común en un tema tan controvertido. Cómo, cuánto y cuando debe intervenir el Estado en la economía es, sin lugar a dudas, el tema que está en el centro del político en todas las democracias del mundo en las últimas décadas.
Y es un aporte valioso que los empresarios hayan dado a conocer su posición en las vísperas del inicio de un nuevo ciclo político. Precisamente, en los últimos años se los cuestionó por no haber hecho escuchar con suficiente firmeza su voz para evitar, en muchos casos, conflictos con el Gobierno. Pero es indispensable que los empresarios ?que deben ser los grandes generadores de empleo de calidad en los tiempos que vienen- dejen en claro su pensamiento. Y que participen del debate público como también deben hacerlo las organizaciones sindicales.
Hay muchas frases conocidas y repetidas sobre la relación entre Estado, mercado y sociedad. A los empresarios se les atribuye que siempre consideran que el Estado es el enemigo hasta el día que necesitan un amigo. Pero en este momento queda poco espacio para las definiciones creativas por cuanto hay que enfrentar desafíos concretos.
Por eso, lo más importante del documento del FCE es que fija algunas pautas sobre las políticas públicas que espera que ponga en marcha el próximo Gobierno. Es una forma de anticipar que medidas puede acompañar, reclamar y cuestionar de una nueva administración. El documento sostiene que el Estado debe estar ayudar a los sectores más vulnerables y, por lo tanto, debe mantenerse y perfeccionarse la AUH. A esta altura, no hay ningún sector del país que se manifieste en sentido contrario porque comprometerse a sostener la AUH se ha convertido en una especie de símbolo al que recurren todos aquellos que quieren dejar en claro que no impulsan políticas que impliquen afectar a los más necesitados.
También se apunta a la necesidad de fortalecer institucional y profesionalmente a los organismos de control del Estado y darles independencia, como en el caso del BCRA. No aporta nada novedoso en ese plano. Pero lo más importante del documento del Foro son las medidas que espera que tome el próximo Gobierno. Allí hay una pista concreta de aquellas iniciativas que los empresarios pueden apoyar o generar críticas sino se avanza con ellas.
Las entidades empresarias cuestionan la intervención discrecional del Estado que interfiere en el ámbito que le es propio a la actividad privada. En esa línea proponen derogar el Decreto 196-15 que les da “indemnidad legal” a los directores del Estado en las empresas. También consideran que deben modificarse la Ley de Abastecimiento y el art. 20 de Ley de Mercado de Capitales. El documento es también muy crítico de los controles de precios.
En definitiva, el documento es un aporte al debate y una guía para los candidatos presidenciales que quieran saber que esperan de ellos los empresarios en caso de que lleguen al Gobierno.
