La confianza del consumidor se redujo 2,6% en julio (frente a junio) ubicándose en un valor de 28,4%. En la comparación interanual registró, en tanto, un alza también de 2,6%. De acuerdo con la medición mensual que realiza Fundación Mercado la percepción de las familias se encontró signada por señales de estancamiento en la evolución del empleo y un desaceleramiento de la actividad económica, enmarcado en un escenario de conflictividad política.
En términos generales, la disminución mensual se debe a un decrecimiento de la percepción de la situación presente de 8,8%, mientras las expectativas desmejoraron 0,9% mensual. Los indicadores parciales arrojan un ajuste en la mayoría de los subíndices, de manera que la percepción de la situación presente de consumo tuvo una desmejora de 20,2%, mientras la percepción de empleo disminuyó 5,1%. Las expectativas económicas y de empleo se redujeron 0,9% y 2,3%, respectivamente, mientras que las expectativas de ingreso se mantuvieron invariables y las inflacionarias empeoraron levemente 0,8%.
En la situación de ahorro, el porcentaje de familias con capacidad de ahorro en julio fue de 15,8%, mientras las expectativas de ahorro aumentaron en 1,1%, y la intención de montos ahorrados respecto del mes anterior mejoró 0,8%.
En cuanto a la tendencia de compra de bienes durables, cuando llegó a 9,2% en julio, menor a junio, que fue de 9,6%. La declinación de la tendencia se produce en un marco de retracción de la situación presente debido a una declinación de la percepción de empleo con expectativas de ingreso estables. En la misma manera, se ajustó el consumo de mediano y largo plazos, puesto que la tendencia de compra de automóviles en julio fue de 2,4% y la intención de construcción de viviendas fue 2,1%.
(De la edición impresa)
