La pobreza afectó a solo 8,3% de los hogares durante el primer semestre de 2011, bajando 3,7 puntos porcentuales en relación al nivel registrado en el mismo lapso de 2010. De acuerdo con los datos del INDEC, también la indigencia se redujo a valores mínimos, al ubicarse en solo 2,4%. Según ese organismo, 455.000 hogares que incluyen a 2.086.000 personas (8,3%) en los 31 conglomerados urbanos medidos se encontraban por debajo de la línea de pobreza entre enero y julio de este año. Se trata de la tasa más baja de la serie histórica del indicador utilizado por el INDEC para medir pobreza. De ese conjunto, 173.000 hogares se encuentran bajo la línea de la indigencia, lo que supone 592.000 personas (2,4%). Los indigentes se incluyen en el total
de pobres, pero se trata de personas cuyos ingresos no alcanzan para pagar una canasta básica de alimentos.
La indigencia y la pobreza se miden sobre la base de las canastas básicas de alimentos (CBA) y la canasta total (CBT), que suma a la CBA servicios, educación y transporte. En junio, una pareja
con dos niños requirió $596,14 para comprar la alimentación indispensable y no ser catalogada de indigente, mientras ese mismo grupo familiar necesitó un ingreso de $ 1.314,16 para no caer en la pobreza.
Según el INDEC, los menores niveles de pobreza se registraron durante el primer semestre en Río Gallegos, con el 1,7%; Ushuaia, 2%; Capital Federal, 2,1%, y Comodoro Rivadavia, con 3,1%. En tanto, las regiones con mayor nivel fueron la del nordeste, con un promedio del 14,4%, y la del noroeste, con el 9,6%, entre otros puntos. En el Gran Buenos Aires, donde reside casi un tercio de la población del país, los niveles de pobreza alcanzaron al 10%, frente al 10,6% de enero-junio del año pasado. De ese total, el 3% son indigentes.
(De la edición impresa)
